LAS FUNCIONES EJECUTIVAS EN EL TDAH

El TDAH (trastorno por déficit de atención con hiperactividad) está asociado con dificultades en las funciones ejecutivas. Las funciones ejecutivas son habilidades mentales que utilizamos para planificar, organizar, prestar atención, regular nuestras emociones y comportamiento, entre otras. Algunas de las funciones ejecutivas que se ven afectadas en el TDAH incluyen:

  1. Atención selectiva: La capacidad de prestar atención a un estímulo específico mientras se ignora otros estímulos irrelevantes.
  2. Control inhibitorio: La capacidad de detener o inhibir una respuesta automática para realizar una tarea más importante.
  3. Memoria de trabajo: La capacidad de mantener información en la mente mientras se realiza una tarea.
  4. Planificación: La capacidad de organizar, priorizar y llevar a cabo tareas en un orden específico.
  5. Flexibilidad cognitiva: La capacidad de cambiar de una tarea a otra o de adaptarse a nuevas situaciones.

En general, las personas con TDAH pueden tener dificultades para controlar su comportamiento y emociones, prestar atención y mantener la motivación para completar tareas. Sin embargo, existen estrategias de tratamiento y manejo del TDAH que pueden ayudar a mejorar las funciones ejecutivas y reducir los síntomas asociados con el trastorno.

 

MEJORAR FIUNCIONES EJECUTIVAS EN TDAH

Existen diversas estrategias para mejorar las funciones ejecutivas en personas con TDAH.

Algunas de estas estrategias incluyen:

  1. Ejercicio físico: El ejercicio regular puede mejorar la atención y la memoria de trabajo en personas con TDAH. Además, el ejercicio puede reducir la ansiedad, lo que puede mejorar la capacidad para planificar y organizar tareas.
  2. Entrenamiento en habilidades sociales y emocionales: El entrenamiento en habilidades sociales y emocionales puede ayudar a mejorar la regulación emocional y la toma de decisiones. A través de la terapia cognitivo-conductual, los individuos pueden aprender a reconocer y controlar sus emociones, así como a desarrollar estrategias para resolver conflictos.
  3. Técnicas de organización: La implementación de técnicas de organización, como listas de tareas y calendarios, puede ayudar a las personas con TDAH a planificar y priorizar las tareas. Además, mantener un ambiente de trabajo libre de distracciones puede aumentar la concentración y la productividad.
  4. Medicación: Los medicamentos para el TDAH, como los estimulantes, pueden ayudar a mejorar la atención y la memoria de trabajo, así como a reducir la impulsividad y la hiperactividad.

Es importante tener en cuenta que el tratamiento del TDAH es individualizado y debe ser personalizado según las necesidades de cada persona. Por lo tanto, es importante hablar con un profesional para decidir las opciones de tratamiento más adecuadas.